Uno de los primeros comportamientos extraños es que comience a orinar fuera de la caja, a ser agresivo o inseguro. A continuación, te mencionamos los más comunes, para que prestes atención a los cambios de comportamiento y puedas actuar preventivamente de manera rápida.

La ansiedad es el comienzo a de futuros problemas que se evidencian en reacciones corporales asociadas al miedo. La ansiedad de separación es la más común entre las mascotas de compañía.

1. Tu gato permanece escondido la mayoría del tiempo

Aunque muchos gatos son menos sociales que otros y les gusta esconderse, pero si tu gato se esconde casi todo el tiempo a tal punto que pareciera que no vives con uno, es una señal de que algo anda mal.

2. Se ha vuelto muy agresivo

Si es agresivo sin ninguna aparente razón, la ansiedad puede estar detrás de ello. Un gato bien educado no tendría que presentar agresividad sin ningún motivo sólido. El aburrimiento puede resultar en ansiedad para un gato que necesita atención y afecto y liberarse de sus frustraciones con agresividad es la forma en que expresa su descontento hacia ti.

3. Maulla con mucha frecuencia

En general el maullido es normal, pero si tu gato trata de comunicarse contigo y llamar tu atención con maullidos excesivos, y no estás seguro que es lo que realmente quiere, es una señal de que está triste e inquieto.

4. Orina fuera de la caja

Si comienza repentinamente a dejar de utilizar la caja y comienza a orinar en cualquier lugar de tu casa, te está queriendo decir algo. Lo primero que debes hacer es descartar que tenga problemas físicos como infección urinaria y probar con otra caja en un lugar diferente, si no funciona es momento de considerar la ansiedad.

5. Tembloroso

En general los gatos odian que los sorprendan, pero si tu gato comienza a temblar regularmente puede significar que está sobre estimulado y necesita una pausa. Crea un espacio seguro para que se pueda relajar en momentos que se sienta abrumado y ansioso.

6. Cambian los hábitos alimenticios

Los gatos que comen solo cuando los estás vigilando o dejan de hacerlo por completo pueden sufrir de ansiedad si antes ya has descartado problemas en su estado físico.

7. Casi no duerme

Los gatos en general duermen mucho, por lo menos 16 horas al día, por lo que si el tuyo pasa más tiempo caminando por todos lados y no duerme es una señal de que está ansioso. La ansiedad provoca sensores en la mente que pueden hacer que tu gato se sienta estresado, nervioso e incómodo sin ninguna razón.

Los gatos son una excelente compañía y como los humanos requieren que cuides su salud mental. Si notas varias de estas señales en tu gato debes estar alerta y tratar de aliviar su malestar. Lo primordial es que lo lleves al veterinario para que te dé indicaciones personalizadas, porque sabemos que todos los gatos son diferentes. Pero existen diferentes formas que pueden funcionar, como prestarle más atención, jugar con él o algunos remedios con hierbas naturales.