Consentir a nuestros amados felinos es sin duda una de nuestras actividades favoritas como cuidadores y dueños; incluso, a pesar de que los gatos suelen caracterizarse por ser de naturaleza independiente y libre, este hecho no tiene por qué evitar que compartamos preciados momentos en compañía de nuestra mascota. Aprende en este artículo de nuestro blog de gatos cómo se debe cargar a un gato, de modo que puedas seguir consintiendo y disfrutando de su compañía, pero sin llegar a hacerlo sentir incómodo. ¡No pares de leer!

¿Por qué es importante saber cómo cargar a tu gato?

Si eres de las personas que aman alzar y cargar a su gato contra el cuerpo, pero continuamente eres víctima de rasguños y mordidas, ¡no te desanimes! Esta situación es recurrente y se debe a que, cada vez que cargas a tu felino, lo haces de manera incorrecta, hecho que lo incomoda y que provoca que recurra a los rasguños y mordidas para escapar. 

Conocer todo sobre gatos, no es tarea fácil, en especial porque en lo relacionado con el contacto físico y las caricias, estas adorables criaturas tienen estándares y parámetros muy específicos. Empecemos con su ojo crítico; los felinos son excelentes juzgadores de carácter, un hecho que influencia su comportamiento. Si lo que perciben los gatos en las personas que desean alzarlos o acariciarlos es negativo, no tengas ninguna duda de que se alejarán de inmediato. 

Aunado a ello, también debemos tener en cuenta su crianza y actual calidad de vida. Las enseñanzas y cuidados de un gato influyen de manera determinante en la forma en que actúan, hecho por el cual si un felino es maltratado en el hogar, muy probablemente esta situación y trauma se refleje en su comportamiento, haciéndolo   evitar a toda costa el contacto físico cercano con los humanos.

Pasos para cargar a tu gato

Ahora bien, si quieres tener éxito y por fin cargar a tu gato sin resultar físicamente perjudicado, sigue atentamente los tips que te compartimos a continuación:

- Acércate lentamente: nuestro gato, al igual que cualquier otra criatura, puede reaccionar de forma brusca si percibe peligro, así que te recomendamos acercarte de manera lenta y tranquila, dándole tiempo a escapar si el felino no desea la compañía de nadie.

- Preséntate: aunque suene un poco ilógico, los gatos son animalitos considerablemente orgullosos, hecho por el cual te sugerimos que, previo a intentar alzarlo, acerques tu mano hacia él y le permitas olfatearte. Si no se retira o si no te rechaza, es una señal de que tu acercamiento o toque, no le molesta.

- Álzalo cuidadosamente: después de que hayas aprobado de manera exitosa las dos primeras pruebas, llegó el tan anhelado momento de alzar a tu mascota. El secreto de alzar a tu felino correctamente radica en la posición; levántalo con tus dos manos, pásale un brazo por debajo de su pecho y el otro por debajo de su abdomen. 

No dejes que ni sus manos ni patas queden al aire, apoya sus manos en tu brazo y toma sus pies con tus manos. De esta manera, el gato se siente cómodo, apoyado y tú mantienes alejadas sus garras. 

¡Y listo! Disfruta del momento mientras tu mascota se relaja contigo. Recuerda dejarla bajar cuando ella lo desee, de esta manera evitas que te rasguñe o que ella se lastime. Si deseas seguir aprendiendo más información sobre los gatos, suscríbete a nuestro blog!